Ésta empresa que dice ser solidaria despidió a nuestra compañera el pasado año de la manera más ruin y humillante que pudo, acusándola de hechos inciertos y que tienen más que ver con el acoso laboral hacia ella que con la realidad. Los hechos de la que acusan a nuestra compañera son mentira en su gran mayoría, y los que pueden ser ciertos no son relevantes para nada, ya que son parte del funcionamiento normal del centro de trabajo.
Recordemos que Ana trabajaba en un centro de ayuda a drogodependientes y personas sin recursos, ella es psicóloga.
Cuando el coordinador del CIBE (Centro de Intervención de Baja Exigencia), J.V., se ausenta de su trabajo por vacaciones y otras cuestiones, Ana le sustituye, haciendo una gran labor, ya que mientras está JV al mando, las irregularidades son muchas, y están denunciadas por varias personas que han trabajado en el centro, (dar comida en mal estado, desprecio hacia la seguridad de las trabajadoras y usuarios, faltas de respeto hacia personas enfermas, etc…) de todo ello la central de la Cruz Roja tiene cuenta, pero nada ha hecho, salvo prometer una investigación que parece haberse quedado en eso, en promesas.
El despido se efectuó estando de baja nuestra compañera por estrés elevado, razón que no tuvieron en cuenta los responsables de Cruz Roja Alicante a la hora de humillarla entre sonrisas delante de su marido, no tuvieron en cuenta nada de lo que Ana aportó o dijo, ni tampoco la debilidad de las acusaciones, sostenidas sólo por el testimonio de una persona en tratamiento psicológico que había, previamente, amenazado a nuestra compañera con arruinarle la vida, mucho menos tuvieron en cuenta estos garantes de la humanidad todos los años de trabajo excepcional que Ana lleva desempeñando en el sector drogodependientes; sólo tuvieron en cuenta una versión, en contra de muchas otras que alegan lo contrario, sólo unas palabras vertidas en un momento concreto que JV recogió e hizo suyas, viendo así el modo de acabar con Ana, de acabar con la persona que cuestionaba su pobre trabajo. Sólo eso y nada más que eso le hizo falta a los responsables de CR para despedir a Ana de manera fulminante, acusándola de hechos tan graves que no podrá ejercer su profesión.
El silencio impuesto desde entonces en el centro de trabajo es latente, a las usuarias/os les tienen prohibido hablar de Ana bajo amenaza de perder el desayuno que allí se ofrece, un usuario de los más activos ha sido dado de alta con la única intención de poder prohibirle el paso al centro, las trabajadoras que han alzado su voz han sido represaliadas, y la amenaza de “tú puedes ser la siguiente…” ya se ha oído.
Porque esto es un ataque más hacia la clase trabajadora, porque son unas prácticas dignas de la peor dictadura, porque Ana no se merece lo que le está pasando y porque no vamos a dejar de luchar contra esta injusticia.
En consecuencia desde el SOV de Elche realizamos dos acciones el pasado viernes 20 de febrero, la primera en Almoradí, la localidad de la Vega Baja volvió a ver como las banderas confederales ondeaban de nuevo en sus calles, recibiendo una muy buena acogida entre sus vecinos que en todo momento se interesaron por el conflicto y alguno nos comentó con añoranza como estas mismas banderas llenaban las calles del pueblo en la época de la segunda República.
La segunda acción fue en la asamblea local de Cruz Roja de Elche donde repartimos octavillas informando a los trabajadores de esta falsa ONG y llenando los coches aparcados en sus cercanías.
.Readmisión inmediata de Ana
.Dimisión de JV.
.Reparación de daños morales y depuración de responsabilidades.
CNT EN LUCHA.