Miles de personas toman las calles del Estado español en apoyo a las trabajadoras de La Suiza y a la CNT
Miles de personas se manifestaron este 18 de julio en 18 ciudades de España para mostrar su apoyo a las trabajadoras de la pastelería La Suiza de Gijón y a la Confederación Nacional del Trabajo. Las concentraciones, que se desarrollaron de forma pacífica y unitaria en muchas ocasiones con otros sindicatos y organizaciones, denunciaron la criminalización de la acción sindical y exigieron la absolución de las seis trabajadoras condenadas a prisión por las concentraciones realizadas frente al local de la empresa en 2017.
Multitudinarias concentraciones en toda España
En Xixón, punto de partida del conflicto, tuvo lugar una de las concentraciones más multitudinarias, al igual que en Barcelona donde la concentración contó el apoyo masivo de manifestantes y simpatizantes de diferentes organizaciones. En otras localidades asturianas como Llangréu, también se registraron concentraciones con gran participación.
Las movilizaciones se replicaron en ciudades de toda España, como Lleida, Huesca, Logroño, León, Cuéllar, Valladolid, Santiago de Compostela, Pontevedra, Iruña, Málaga, Ciudad Real, Burgos, Cáceres, Segovia y Villaverde.
Un mensaje claro:
Las manifestaciones de ayer ponen de manifiesto el amplio rechazo social a la condena de las trabajadoras de La Suiza y el apoyo a la lucha por la libertad sindical. Las concentraciones han servido para visibilizar la criminalización de la acción sindical y para exigir al sistema judicial que revise la sentencia condenatoria.
Erika Conrado, Secretaria General de CNT: «No podemos permitir que este nuevo caso de represión sindical nos haga retroceder»
Una alianza sindical “histórica” para defender a ‘Las seis de La Suiza’: “No podemos agachar la cabeza”Una quincena de sindicatos anuncian movilizaciones contra la sentencia del Supremo que ratifica la condena a tres años y medio de prisión a seis sindicalistas, porque supone una “coacción y represión” contra la lucha sindical.
No es habitual ver en la misma mesa a representantes de organizaciones sindicales como la CNT, la CGT, Comisiones Obreras, UGT, Solidaridad Obrera, Co.Bas o el SAT. La doble condena a ‘Las seis de La Suiza’, que deberán afrontar tres años y medio de cárcel, ha puesto de acuerdo a una quincena de sindicatos, que han denunciado este sábado la “ofensiva contra el derecho sindical” y han recordado que “gracias a las luchas de la clase trabajadora” se han conseguido “las mejoras laborales y sociales” de las que la ciudadanía disfruta hoy en día.
El Supremo confirmó en junio la condena a tres años y medio de prisión a las ‘Las seis de La Suiza’, al considerar que las concentraciones frente a la pastelería constituyeron un delito continuado de coacciones graves y otro de obstrucción a la Justicia. A juicio del Tribunal, sus acciones, ocurridas en 2017 en solidaridad con una trabajadora, también condenada, que denunció a su jefe como presunto autor de sendos delitos de acoso laboral y sexual, que finalmente se archivaron, provocaron el cierre del negocio.
La sentencia, consideran los sindicatos, supone un duro golpe que pretende dejarlos con las manos atadas. “No podemos permitir que se nos vaya a acusar de delitos por practicar, simple y llanamente, las tácticas y las maneras de trabajar del sindicalismo”, ha reivindicado la secretaria general de la CNT, Erika Conrado, que ha considerado el pronunciamiento del Tribunal un “atropello para las organizaciones sindicales a pie de calle”. “La actividad sindical nunca debe ser considerada delito”, ha reclamado.
Durante la rueda de prensa de este sábado, Herminia, la portavoz de Sofitu, el grupo de apoyo y solidaridad con ‘Las seis de La Suiza’, ha recordado que lo que hicieron estas sindicalistas fue, simple y llanamente, “acción sindical”. “Se intenta la negociación, no hay negociación y se pasa a la movilización. No hay otra”, ha explicado antes de recordar que las concentraciones frente al centro de trabajo estaban autorizadas por la Delegación del Gobierno, en aquel momento del Partido Popular, y que en ellas no hubo “ninguna intervención policial”.
“Es un ataque directo a todo tipo de sindicalismo”, ha coincidido el secretario general de la CGT, Miguel Fadrique. “Pese a las diferencias históricas que hemos tenido, tenemos una historia común que nos une. Ante esta grave situación, no podíamos hacer otra cosa que estar a su lado”, ha indicado para reclamar “una respuesta contundente para que las compañeras no entren en la cárcel”. Por el momento, la CNT estudia llevar la sentencia ante el Tribunal Constitucional y el próximo jueves, día 18, se convocarán concentraciones en varias ciudades. “Lo que no podemos hacer es agachar la cabeza, tenemos que dar apoyo a las compañeras, no las vamos a dejar solas”, indicó Conrado en un mensaje que han compartido todas las organizaciones sindicales. “El indulto a estas compañeras sindicalistas y a todas y todos los reprimidos por luchar debería ser una prioridad para cualquier gobierno que se considere progresista”, han reclamado desde el Sindicato de Comisiones de Base.
“Retorciendo las leyes”
“Esto no es nuevo, estamos viviendo desde hace tiempo una constante represión de la movilización social, o retorciendo las leyes que nos amparan o mediante la utilización de la ley mordaza, que ya debería haber sido derogada”, ha reclamado la responsable de Institucional de CCOO, Carmen Vidal. El vicesecretario general de política sindical de UGT, Fernando Luján, ha mostrado también su “preocupación” por la deriva judicial y ha señalado que esta sentencia “coincide en el tiempo con otra que absuelve a unas personas que han estado acosando durante siete meses, en las puertas de su casa, a un vicepresidente del Gobierno (Pablo Iglesias) y a una ministra de Igualdad (Irene Montero)”. “Eso fue susceptible de absolución y una concentración con banderas autorizada pidiendo que se respeten los derechos básicos de una personas son coacciones graves. Esta deriva tiene que parar”, ha reclamado.
Durante la comparecencia, los portavoz de las organizaciones sindicales han recordado otros casos de condena a la actividad sindical que marcan esa “deriva autoritaria”. El pronunciamiento del Supremo “ocurre en el marco de sucesos como el de ‘Los 8 de Caixabank’, el de Raquel Rodríguez en la huelga de metal de Cádiz o los trabajadores del metal, sometidos a una presión penal constante”, ha enumerado el secretario de organización de Solidaridad Obrera, José Luis Carretero, que ha señalado que el Supremo “vacía de contenido el artículo 28 de la Constitución”, que reconoce el derecho a la libertad sindical. “Ataca a los elementos de flotación del sindicalismo en uno de los sectores más importantes, porque el 80% del empleo se desarrolla en el marco de las pequeñas empresas”, ha recordado.
En la mesa estaba también Víctor Jiménez, miembro de la Asamblea Nacional del SAT y condenado por asaltar un supermercado, en una acción enmarcada en lo que denominaron “expropiación de alimentos” de primera necesidad para repartir entre colectivos vulnerables. “Nosotros, como sindicato, hemos sufrido la represión periódicamente”, ha dicho, pare señalar que “el juez que condena a estas mujeres es conocido en Gijón, porque es el mismo que condenó a Cándido y Morala”.
En la memoria colectiva del sindicalismo asturiano permanece todavía latente el recuerdo de Cándido González Carnero y Juan Manuel Martínez Morala, iconos de la lucha laboral en la región y que fueron condenados en 2007 a más de tres años de cárcel por destrozar una cámara de vigilancia que apuntaba a la puerta del astillero en 2005, durante unas protestas por el cierre de la empresa. Ellos siempre consideraron ser chivos expiatorios en una condena a la barricada. La contestación social fue tal que, en unas semanas, les concedieron el tercer grado y un par de años después, un indulta que nunca solicitaron. Como explicaron en una entrevista en 2019, “si es hoy, con el estado de represión que está habiendo, nos chupamos la condena entera, porque tampoco hay el mismo grado de presión que hubo entonces”.
Esa presión es la que quieren retomar ahora los sindicatos para que ‘Las seis de La Suiza’ no tengan que entrar en prisión. De momento, dos de ellas, Luara y su pareja Héctor, el único hombre condenado, afirman en este reportaje que afrontan la situación con coherencia y dignidad: “Estábamos haciendo un bien ayudando a una mujer, a una persona que lo necesitaba en ese momento. Y además, estábamos haciendo algo que es un derecho. Mostramos nuestro apoyo desde un punto de vista sindical y feminista. Se hizo sindicalismo y se hizo feminismo”.
Tenemos ya en el local del sindicato el número de junio de la publicación anarquista Todo Por Hacer.
Contamos en este número con artículos sobre las acampadas propalestinas en las universidades, entrevista a la Federación Anarquista Era de Irán y Afganistán, la Bienal Anarquista de Madrid, entrevista con Iñaki de El Lokal de Barcelona, las ejecuciones de anarquistas y la «mano negra» en Jerez de la Frontera en 1884, el Ministerio de Infancia y Juventud y su poca o nula utilidad real, y el informe Banking on Climate Chaos (Apostando por el caos climático) sobre la financiación de combustibles fósiles de los grandes bancos a nivel mundial. También tenemos la presentación de los ensayos «Anarquismo no fundacional», «Capitalismo racial» y «Palestina, anatomía de un genocidio».
Una sentencia del Tribunal Supremo conocida este lunes 24 de junio, aunque fechada elmartes 19 del mismo mes, abre una peligrosa puerta a que el sindicalismo sea perseguidoen todo el Estado español.
La CNT va a recurrir en todas las instancias posibles, a nivel español y europeo, para que se haga justicia con este caso que supone un ataque terrible al trabajo sindical.»Somos incómodos para el sistema. Nuestro ámbito es la calle y lo que no podemos hacer es renunciar a ella. Forma parte de nuestro ADN y es lo que vamos a seguir haciendo. Las compañeras no van a estar solas en ningún momento, y aunque creemos que esta sentencia es un bombazo al sindicalismo, seguiremos estando del lado de las trabajadoras», ha dicho Erika Conrado, secretaria general de CNT, al conocerse la sentencia.
Los magistrados de la Sala Segunda del Alto Tribunal, presidida por Manuel Marchena, han rechazado el recurso de casación que interpuso el sindicato CNT por las 6 de La Suiza,sobre las que ratifica las penas de cárcel de tres años y medio y a una indemnización de125.428 euros al empresario.
La sentencia 626/2024 del Supremo rechaza en 57 páginas los recursos interpuestos y ratifica las condenas a las seis compañeras por un delito de coacciones graves y otro contra la administración de justicia. Los hechos probados hablan de concentraciones que se sucedieron entre mayo y septiembre de 2017 frente a la pastelería en cuestión.Concentraciones, por otro lado, comunicadas a las instituciones pertinentes y que son parte consustancial de las campañas que cualquier organización sindical ejerce.
La historia del conflicto entre CNT Xixón y La Suiza arranca en 2017 cuando una persona,entonces empleada de esta pastelería, acude al sindicato a exponer su caso: la empresa le debe horas extras y vacaciones. El sindicato intenta negociar con el empresario, pero ante su cerrazón el sindicato inicia su habitual campaña de denuncia.El propietario de La Suiza comienza entonces a interponer denuncias y en junio de 2021 el controvertido juez Lino Rubio Mayo condena a cinco mujeres y a un hombre a tres años y medio de cárcel y a pagar una indemnización de más de 150.000 euros.
Manifestarse en la calle, repartir octavillas y compartir soflamas con un megáfono, hechos que se pueden circunscribir al desarrollo de una normal y habitual acción sindical, acaban siendo reprimidas por el Juzgado de lo Penal xixonés con el argumento de que la pastelería acabó cerrando por la inferencia de estas protestas, algo que primero la Audiencia Provincial y ahora el Tribunal Supremo avalan.
La sentencia del Supremo conocida hoy, que no se detiene sin embargo a valorar la pena de banquillo y el calvario procesal al que han estado sometidas durante siete años estas compañeras y que ahora continúa de la peor de las maneras.Esto es grave por un sencillo motivo: desde ahora, cualquier persona que se manifieste contra una empresa puede encontrarse en la misma situación. Hacer sindicalismo no es delito, aunque la sentencia hecha pública por el Tribunal Supremo hoy lo ponga en duda.Desde que comenzó el conflicto, todos los sindicatos de CNT así como otras organizaciones amigas se han volcado en una campaña de solidaridad con las 6 de La Suiza. Esa solidaridad no termina ahí, de igual manera que este proceso tampoco ha concluido hoy.En 2022, cuando todavía quedaba esperar que el Supremo admitiera a trámite el recurso,una multitudinaria manifestación de sindicatos de la CNT y organizaciones amigas desfilaron por el centro de Madrid recordando que hacer sindicalismo no es delito. La estampa se repitió a mediados de junio en otra manifestación en Xixón, a la que acudieron sindicatos de CNT de todo el territorio.El pasado martes 19 de junio, día en el que se comenzó a valorar el recurso —y se dictó sentencia—, un centenar de compañeras de los sindicatos de CNT en la Comunidad de Madrid se manifestaron a las puertas del Supremo para volver a hacer llegar el mensaje.Hacer sindicalismo no es delito.
La voz de las 6 de La Suiza y de la CNT no se apaga hoy. Lo repetimos una vez más: hacer sindicalismo no es delito. Y ahora: todas a las calles.
Aromas de Frente Popular, o al menos de frente sindical antirrepresivo. Organizaciones muy diferentes, a menudo con grandes enfrentamientos, fueron sin embargo capaces de aparcar sus desacuerdos este sábado y cerrar filas en Xixón para manifestarse por la libertad de las “6 de La Suiza”, sobre cuyo ingreso o no en prisión decidirá este martes el Tribunal Supremo.
CNT, CGT, CCOO, UGT, CSI, LCT y los sindicatos que componen la Intersindical Asturiana marcharon juntos desde la Casa Sindical hasta el Ayuntamiento en una manifestación que contó con el apoyo de IU, Podemos, Andecha Astur, PCTE, Aína y Anticapitalistas. La llegada de autobuses de toda España con esforzados militantes de CNT dispuestos a hacerse muchas horas de viaje, agregó más masa crítica a una convocatoria animada y vociferante en la que no dejó de sonar al paso por las calles del centro de la ciudad la consigna de “Las seis de Xixón no entran en prisión”.
“Hoy está en peligro el movimiento sindical” advirtió Javier Fernández Lanero, secretario de UGT, en referencia a una marcha en la que más allá del caso particular de las militantes de la CNT están en juego libertades sindicales básicas como los piquetes, sin los que recordó el derecho de huelga queda muy cojo: “Puede sentar un precedente peligroso”.
La continuidad de la Ley Mordaza, el ascenso de la ultraderecha, el ingreso en prisión de “Los 6 de Zaragoza”, acusados de altercados durante un mitin de Vox, o la ofensiva antisindical de los medios conservadores, fueron el telón de fondo de todos los discursos que se escucharon en la Plaza Mayor, en la que también tomaron parte representantes de las condenadas.
“Si sale adelante nos condenan a todos” explicó José Manuel Zapico, de CCOO, que en su intervención enlazó el caso de La Suiza con el Proceso 1001 o los más recientes “Ocho de Airbus”. “Es una sentencia injusta” zanjó sobre la condena.
La otra rama del anarcosindicalismo, CGT, también estuvo presente en la movilización. Yanira Hermida. del sindicato, señaló la lucha por La Suiza es una lucha “en defensa de una vida que merezca ser vivida”. Alba García Torres, de CNT, y profesora de Derecho del Trabajo, recordó: “Estamos haciendo justicia en colectivo, en común”.
Tras la manifestación la jornada siguió con comida popular y conciertos en la Casa Sindical.